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MSI GTX 780 Twin Frozr Gaming

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Games

En juegos la  GTX 780 Twin Frozr Gaming garantiza excelente jugabilidad con los detalles al máximo donde la configuración en el Max Payne 3 se encuentra en su techo. Con las tecnologías de NVIDIA obtenemos una experiencia placentera y si no es suficiente existe también la posibilidad de formar SLI para aumentar considerablemente la cantidad de FPS en altas resoluciones.

Crysis 3 es otro juego demandante y la GTX 780 mantiene su nivel sin inconvenientes cosechando de la mano de MSI 45 fps siendo un valor saludable cuando se trata de jugar. Claramente aquí se aprecian mejoras gracias a la arquitectura de NVIDIA. 

En el Borderlands 2 la GTX 780 arroja una contundencia inigualable alcanzando los 133 fps contra los 105 que puede llegar a dar una GTX 760. La placa de video de MSI se destaca en la posibilidad de habilitar todas las tecnologías y detalles para disfrutar del juego como corresponde.

Calor…

Por último analizamos las temperaturas de trabajo comenzando por el modo reposo donde la exigencia del GPU y memorias es mínima. En este caso cosechamos un promedio de 30 grados manteniendo las expectativas siendo la tecnología Twin Frozr realmente eficiente. Cuando elevamos el uso del GPU al 100% el valor asciende hasta los 65 grados sin escuchar algún ruido de los ventiladores, algo para destacar.

Claramente la tecnología que implementa MSI resulta un complemento ideal para la GeForce GTX 780 ya que además de mejorar la calidad e incluir componentes de clase militar otorga una amplia capacidad de OC con temperaturas acordes a la esperada.

Conclusión:

El lanzamiento de la GeForce GTX 780 por parte de NVIDIA ha generado buenas expectativas especialmente en rendimiento y arquitectura que muchos fabricantes han aprovechado como el caso de MSI que impone su sello con características y calidad importantes que aumentan el nivel satisfactorio de experiencia frente a la pantalla permitiendo elevar los detalles gráficos al máximo posible.

Si diseño no solo llama la atención sino que emplea componentes durables y eficientes que permiten estresar a la tarjeta al límite acompañando con software especial para ello. Por un lado Gaming App para acceder automáticamente a perfiles pre-configurados y por el otro al After Burner para realizar cambios manualmente, ideal para los usuarios experimentados. 

El rendimiento está fuera de discusión, en todas las pruebas supo manejarse con holgura entregando muy buenos promedios de fps tanto en pruebas sintéticas como en juegos que con SLI sale disparado hacia las nubes. En comparación a un modelo de referencia las frecuencias iniciales de fábrica otorgan mejor margen de performance (dado que es una edición OC) y su refrigeración complementa con moño al producto final siendo sus más destacadas cualidades.

Con un precio que se ubica en los 660 dólares (USA, aproximado) es un modelo solo para entendidos que buscan una versión superior de la GeForce GTX 780 con agregados extras para poder jugar a los últimos juegos del mercado, sin lugar a dudas un producto recomendado.

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