Con la llegada de Windows 8, Microsoft promete ofrecer una solución más intuitiva e innovadora al usuario a través de su interfaz llamada Metro, que elimina el botón “start” e incorpora una interfaz similar a la que se encuentra en dispositivos móviles como Windows Phone7 y las tablets. En este caso, el poder de procesamiento es fundamental para entregar fluidez y velocidad a las tareas y a la experiencia visual del nuevo sistema operativo.
Las expectativas respecto a la llegada de Windows 8 son altas ya que este nuevo sistema operativo representa un salto interesante hacia un cómputo cada vez más visual. La nueva interfaz Metro hace un uso masivo e intenso de gráficos y se complementa perfectamente con el desempeño de la familia de procesadores AMD Fusion, que se destacan por combinar procesamiento de cómputo y gráficos de alto rendimiento en todos los segmentos de precio.
Una de las principales características de Metro es que viene del mundo de los teléfonos y posee una interfaz muy similar a la de Windows Phone7. La misma está diseñada para tablets, con un esfuerzo muy grande para mantener la usabilidad en equipos tradicionales de mouse y teclado, pero que sigue la tendencia del mundo de los dispositivos móviles. Para poder tener una interfaz (que es mucho más gráfica y visual de lo que se ha visto hasta el momento es necesario tener un soporte de hardware que permita usar prestaciones que brinden una mejor disponibilidad y una mejor experiencia con ese entorno. Los procesadores AMD, con su arquitectura APU, cuentan con procesamiento de cómputo heterogéneo en el que se obtiene tanto un proceso tradicional como proceso de aceleración gráfica en una misma unidad Gracias a esta tecnología, Windows 8 logra un desempeño mucho mejor, y la experiencia del usuario es superior frente a una plataforma tradicional.
Los nuevos usuarios
La utilización que hace el usuario de la tecnología, es radicalmente distinta a la que existía hace una década, hoy se centra en experiencias touch y mucho más visuales. La nueva filosofía Metro sigue esta tendencia entregando una experiencia distinta, más comunicativa desde el punto de vista de interacción con el usuario y eso requiere una plataforma que permita brindar mejores animaciones, mejores gráficos y una experiencia más rápida en el despliegue integral del sistema operativo. La tecnología AMD es un soporte heterogéneo para los usuarios actuales, que une el proceso tradicional y proceso paralelo, ya que la forma en que la gente ocupaba su computador cambió y la tecnología debe adaptarse a ello.
Los APUs de AMD pueden acelerar nativamente HTML5, lo que es fundamental para Metro ya que guarda gran parte de su código allí, así también contenidos Flash y cualquier aplicación diseñada con Visual Studio.
Por otro lado, Windows 8 descansa sobre la arquitectura de Microsoft DirectX, por ende un equipo que soporte DirectX 11, tendrá todas las prestaciones gráficas de animación y de interfaz del nuevo Windows activadas, experiencia que será parcial en computadores que no sean compatibles con ese protocolo.
Windows 8 brindará una interfaz aún más amigable y adaptada al consumo instantáneo de contenidos que se está popularizando en equipos portátiles, a la vez que proveerá un manejo energético y de memoria más eficiente que mejore la experiencia de uso.
Una nueva plataforma que anuncia un cambio de paradigma en nuestra interacción con el computador; una experiencia que destaca por lo visual, donde la capacidad de procesamiento del hardware es fundamental para poder disfrutar de las mejoras y de todas las nuevas características del nuevo lanzamiento de Microsoft.
José Luis Fernández, Senior Field Aplication Engineer AMD Spanish South America.
