Windows 8 podrá hacer uso de múltiples núcleos trabajando en paralelo para procesar los distintos módulos que comprenden los procesos de encendido y apagado del sistema operativo, ayudándose de técnicas similares al proceso de reanudación luego del proceso de hibernación usado en la actualidad por Windows 7 y otros sistemas operativos contemporáneos de la propia Microsoft. Esto según Microsoft es un proceso mucho más óptimo que el “viejo” esquema actual donde cada ciclo de encendido/apagado requiere un inicio completamente nuevo de todos y cada uno de los procesos y servicios implicados; un proceso considerado obsoleto.
Windows 8 realizará un uso inteligente del proceso de hibernación aplicándolo únicamente a los procesos que comprenden al propio núcleo del sistema operativo, únicamente necesitando cerrar (o volver a iniciar desde 0) los procesos de las sesiones de usuario. Gracias a este eficiente uso del proceso de hibernación se crearán pequeños archivos precargados, los que debido a su reducido tamaño serán leídos y procesados velozmente por todos los núcleos disponibles en los modernos microprocesadores, permitiendo una mejora de rendimiento de entre el 30% a 70% (dependiendo de la potencia del equipo) en el tiempo de arranque y apagado.
Fuente: Tom’s Hardware