En 2008 la Unión Europea multó a Microsoft por haber cobrado sumas excesivas a sus competidores a cambio de información para productos compatibles con Windows.Sin embargo, como suele suceder en estos casos, la empresa apeló y tras cuatro años de explicaciones y trámites, el Tribunal General de la Unión Europea ha confirmado la decisión de 2008, insistiendo en que Microsoft habría abusado de su posición dominante.
Así las cosas, Microsoft debe pagar una multa, que para su ‘buena suerte’ fue ligeramente reducida: De US$ 1.4 mil millones (899 millones de euros) a US$ 1.1 mil millones (860 millones de euros). Vamos, que no es mucho lo que le rebajaron de la sanción, pero ante semejantes cifras, por poco que parezca el descuento estamos hablando de mucho dinero.
Ahora bien, que el Tribunal General de la UE haya desestimado las explicaciones de Microsoft y por tanto ratificado la multa, no quiere decir que el gigante de la informática vaya finalmente a pagar… Y es que aún queda una oportunidad de recurrir la sentencia ante el Tribunal de Justicia, la máxima instancia judicial de la Unión Europea. ¿Tardarán otros cuatro años en el trámite? Cuestión de esperar.
Fuente: The Verge