La reciente disputa entre Apple y Facebook sobre las pautas de privacidad más nuevas obligarían a las empresas a revelar cómo sus aplicaciones utilizan los datos de un cliente y requieren usuarios a Opt-In, para permitir la recopilación de datos personales.
Hasta la fecha, las aplicaciones han podido aprovechar la función Identificador de Apple para anunciantes (IDFA) para analizar los datos del usuario y proporcionar publicidad dirigida. Sin embargo, el lanzamiento de iOS v14.5 de esta semana cambia el paradigma. En lugar de tener que pasar por los obstáculos para optar por no participar, con la última actualización de iOS de Apple, se requieren aplicaciones para informar a los usuarios con más detalles sobre las solicitudes de monitoreo de datos y pedirles a los usuarios que se inscriban para ofrecer sus datos.
Según los datos publicados por Flurry Analytics, el 95% de los usuarios de iOS en los EE. UU. han denegado las solicitudes de aplicaciones para rastrear los datos del usuario (tasa de aceptación del 5%). Ese número cae un 87% en todo el mundo (13% de tasa de participación). Flurry Analytics es propiedad de Verizon Media y se emplea en más de 1 millón de aplicaciones. Según la compañía, proporciona información sobre aproximadamente 2 mil millones de dispositivos móviles por mes.
Con el seguimiento de los datos de los usuarios de iOS esencialmente colapsando de la noche a la mañana, la capacidad de Facebook (y de otros) para mostrar anuncios dirigidos a los usuarios de iOS, utilizando al menos métodos tradicionales, se ha desvanecido de manera efectiva. Dicho esto, la publicidad dirigida representa una parte tan grande de los ingresos de empresas como Facebook, Google y Amazon, que no es probable que el último movimiento de Apple sea el final de la historia.
