En Fujitsu no están muy contentos con las estimaciones para el fin de su año fiscal, que se cierra en marzo del 2013. Y esto porque han tenido que cambiar los números, y si antes proyectaba 7 millones de equipos distribuídos en total, ahora con algo de suerte podrían sobrepasar la barrera de los 6 millones. Y parte de la culpa de esto se debe a Windows 8.
Según el presidente de Fujitsu, Masami Yamamoto, el interés de la gente por el nuevo sistema operativo no es muy alto como todos esperaban. A eso también hay que sumarle otros factores, que tienen que ver con la crisis económica europea y que se traducen en una muy baja demanda de nuevos equipos.
Lo cierto es que al parecer ni en Microsoft estarían demasiado felices respecto al comienzo de Windows 8. Ya la gente de Acer y Asus ha hecho comentarios que siguen esa misma línea, pese al entusiasmo que expresa Steve Ballmer cada vez que habla del nuevo producto estrella de Redmond. Y es que aún con la importante cantidad de licencias vendidas, la entrada de Windows 8 al mercado no ha supuesto un gran impacto en el segmento, que está viendo como la gente empieza a optar cada vez más por otro tipo de equipamiento, léase tablets.
Sea como sea, todavía es temprano para dictar sentencia sobre Windows 8. El hecho de que varios fabricantes se quejen casi de manera simultánea sobre los resultados iniciales no es menor, pero como siempre en estos casos, el tiempo dirá.
Fuente: Bloomberg News
