Hablar de estos temas siempre me pone nostálgico y no es que sea viejo, sino porque ya pasó mucho tiempo desde la última vez que utilice Winamp como mi reproductor default para música digital. Tal vez algunos de ustedes lo recuerden, pero para los que no lo recuerdan, me permitiré refrescarles la memoria.
Allá por finales de la década de 1990 cuando el formato de audio digital MP3 se volvió extremadamente popular y comenzaron a salir aplicaciones denominadas Jukebox; para reproducir la música.
Originalmente lanzado en 1997 por dos chicos, el norteamericano Justin Frankel y el ruso Dmitry Boldyre, Winamp rápidamente se convirtió en el estándar de reproducción para archivos MP1, MP2, MP3, MIDI y Mpeg-1. En aquellos años no había muchos programas capaces de reconocer el formato y los que había no eran muy buenos. Los que tengan más de 30 te podrán decir cómo por esos años al pie de las páginas web podías encontrar el ícono con la liga de descarga de Winamp, que fue una de las cosas que lo hicieron tan popular.
Las opciones en aquel entonces eran: Windows Media Player, que era una pesadilla por la gran cantidad de espacio que ocupaba en RAM, Real Player que era… raro y Winamp que podía correr toda tu música sin que se te muriera tu pobre Pentium I o II. Por raro que suene, en los 90′s ninguno de los dos programas podía manejar algo como las listas de reproducción, ni eran tan eficientes como Winamp en el uso de recursos.
Gracias a que funcionaba por módulos tu podías escoger qué tener en pantalla y qué no, podías tener solo el ecualizador y tu playlist, minimizado además que su versatilidad te dejaba incluso crear tus propios skins (el mío era de Metal Gear). Otra de las opciones que lo volvió popular fue que te dejada ripear (pasar a formato MP3) la música de tus CD, y así poder compartirla vía Napster (otro triste recuerdo).
Frankel creó entonces Nullsoft y junto con Rob Lord, se dedicaron a impulsar su producto convirtiéndose casi de inmediato en la mejor opción. El software se distribuyó como Shareware a un precio de USD$10, aunque podías descargarlo completamente gratis. ¿Significaba eso que Nullsoft no generaba ingresos con Winamp? Según Lord dijo a Ars Technica, alcanzaron a recolectar USD$100.000 mensuales por los pagos hechos por la gente.
Desafortunadamente, sus creadores tuvieron la brillante idea de vender Nullsoft con Winamp y su mascota Mike the Llama a la empresa AOL en 1999, empresa que así como hizo pedazos su servicio de internet para el hogar, terminó por destruir la imagen del famoso reproductor de audio.
Al mismo tiempo, AOL adquirió la compañía de radio por internet Spinner. Ambos proyectos fueron fusionados en Winamp, causando que las personas que provenían de una y otra empresa comenzaran con una serie de conflictos sobre hacia dónde ir con el programa. AOL decidió que la gente de Spinner llevaría la administración.
Bajo este formato lanzaron varias actualizaciones del programa de manera gratuita, pero en el año 2003 terminaron por cerrar las oficinas de que tenían en San Francisco y dos años mas tarde, Frankel y Lord abandonan todo, dejando el proyecto en manos del corporativo que efectivamente, hunde a Winamp en el pantano de el software olvidado por lo usuarios, esto en parte debido a la inclusión de módulos idioticos, como obligar a los usuarios a instalar Netscape o adiciones de AOL, que hacían muy pesado el programa.
A los problemas de administración y malas decisiones de gestión se sumó el lanzamiento del iPod en 2001, atándolo a iTunes. AOL no logró hacer que Winamp pudiera adaptarse y competir, pese a que habían lanzado también su propio servicio de música. Mientras el iPod e iTunes crecían, Winamp empezó a desaparecer.
Sin embargo aún existen fieles seguidores de este software, de hecho, se estima que tiene unos 30 millones de usuarios que lo utilizan a diario. Actualmente la más reciente actualización de Winamp ofrece reproducción de audio, video, listas, podcasts, importación de librerías de iTunes y por una módica cantidad adicional (el reproductor es gratuito todavía) te puedes llevar la versión Pro que te permite grabar discos compactos codificar a MP3 y los codecs de video H.264.
Por si te lo preguntas la respuesta es: si, Winamp sigue siendo pequeño y poderoso como antes, por lo menos en lo que se refiere a reproducir formatos de audio. Acepta más formatos como WMA, AAC, hay más skins y esta disponible en versión Android para smartphones.
Aunque iTunes es el programa con mayor éxito ahora, Winamp sigue ahí – en manos de AOL todavía – aunque hay algunos que tienen esperanza de que renazca, quizás con alguna novedad que pueda volver a darle relevancia. Después de todo, todavía son 30 millones de usuarios en el mundo los que lo usan.
Yo por mi parte confió mi amor a AIMP3 sin dudas de lo mejor…
Fuente: ArsTechnica