Muchos hemos escuchado el adjetivo “coreano” en referencia a quienes hacen del juego en línea algo más que un pasatiempo. Lo cierto es que el término no es gratuito para con el gentilicio de Corea del Sur, ya que dicha nación es conocida por la afición de sus jóvenes a la Internet y los videojuegos. Igual que acá.
Lo cierto es que la polémica ahora estalló gracias a la entrada en vigencia de la “Ley Cenicienta”, o lo que es lo mismo, una prohibición para que los menores de 16 años no puedan entrar a sitios web de juegos después de las 12 de la noche. La idea con esto es poder combatir la adicción a Internet que se da especialmente en los jóvenes adolescentes, con porcentajes de 14% de adictos entre los muchachos de 9 y 12 años.
El asunto es que hay mucha gente reclamando a esta ley; algunos la llaman derechamente “idiota e inútil”, mientras que el abogado Lee Byung-chan va más allá y argumentan que con esto “se le quita la libertad a los padres de elegir como educar a sus hijos”. Hasta ahora, el gobierno coreano no parece que vaya a dar pie atrás con esta acción, y de la misma forma, sería casi iluso pensar que esta regulación es ciento por ciento efectiva.
Como bien dice el mismo Lee, si el alcoholismo se mide por la cantidad de alcohol que se consume y no por la hora en que se hace, lo mismo pasa con los juegos de video. El asunto es que en un país como Corea no se puede tratar de la misma forma que en otros lares, principalmente porque es quizás donde el “professional gaming” tiene prácticamente el mismo nivel de popularidad que cualquier otro deporte.
Una pena por los coreanos (los de verdad, no los de acá) menores de edad, pero yo sigo pensando que esto es algo que deberían controlar los papás antes que otro ente. Igual que con la compra de juegos para mayores, y todas las regulaciones que tienen que ver con educación sobre el consumo y otras hierbas, pero este es un cuento diferente.
Fuente: CNN
