La fiebre de instalar Windows 8 no se la pueden aguantar algunos. Para ellos que no pueden esperar más días, especialmente aquellos que planean desarrollar algo para el nuevo sistema operativo de Microsoft, hay una buena y barata forma de hacerse de un tablet con Windows 8. Simplemente, hay que actualizar.
La premisa es muy obvia: comprar un tablet con Windows 7, y actualizarlo. Algunos fabricantes decidieron probar en el mercado cómo funciona Windows 7 en un entorno táctil, pero ese sistema operativo no es conocido por tener una interfaz amigable en ese sentido. Por esa razón, y otras más, es posible encontrar estas pseudo-aberraciones entre USD$600 y USD$700. Ejemplos son el Acer Iconia W500, el ASUS Eee PC T101MT Convertible y el HP Slate 500.
Como los requisitos para correr Windows 8 Developer Previewson los mismos de Windows 7, sólo hay que ingeniárselas instalando la imagen que es posible descargar desde Microsoft. La forma fácil es descargar y “actualizar” siguiendo los pasos, pero la que siempre ha sido mejor es la de borrón y cuenta nueva: instalar desde cero. Para lo último hay que tener un pendrive o disco duro USB con la imagen “booteable” además de la posibilidad de conectar un ratón y un teclado.
La guía completa y con detalles está en ExtremeTech, y van a necesitar saber inglés además para usar Windows 8. Con esto deberían tener grandes facilidades para armar sus aplicaciones en Windows 8 y prepararlas para cuando el sistema operativo salga el próximo año, o simplemente “probar” la experiencia. ¿Ven? No es tan caro después de todo.
Fuente: ExtremeTech | LifeHacker