Se habla y mucho ahora último sobre la futurible nueva generación de consolas, que para muchos es casi una necesidad. Lo cierto es que a seis años de la salida de la Xbox 360 (que abrió los fuegos) quizás puede parecer mucho tiempo para jugar con las mismas máquinas por una cosa de costumbre, pero ¿qué tan bueno o ventajoso podría haber en el caso de que la nueva generación salga mañana?
Lo que Cliff Bleszinski tiene más o menos claro es que con la next-gen habrá un problema mas o menos grande, y que no es otro que la elevación excesiva de los costos de desarrollar un juego “triple A”. En entrevista con la OXM, el creador de Gears of War comenta que la salida de un nuevo hardware definitivamente podría hacer que los juegos grandes desaparezcan, o al menos, que disminuyan el ritmo actual. Y todo gracias al dinero: “los juegos AAA con campañas de seis u ocho horas de duración podrían ir en retirada, tal vez salga apenas unos tres o cuatro por año, y serían marcas establecidas”.
Y es que esto no hace más que confirmar dos cosas. Primero, que utilizando criterios estrictamente empresariales, el modelo de negocio actual pero escalado a presupuestos mayores -como ser una nueva generación de consolas ahora ya- terminaría convirtiendo todo en una burbuja, y las advertencias están ahí: Bizarre y Black Rock que en paz descansen, o Evolution que casi desapareció si no hubiera sido por el salvavidas de Sony.
Segundo, y tal vez más relevante para los jugadores, es que necesitamos juegos del tipo “medio”. El extremismo actual de “o juego indie o juego AAA” está siendo de todo menos saludable, y como dice el buen Bleszinski, hoy en día se necesita gente que entienda la tecnología a la hora de crear un juego, pero que también sean creativos y que comprendan como funciona el negocio.
Fuente: CVG
