Comunicado de prensa
Hace poco más de unos días, el mercado de las criptomonedas se estaba expandiendo como loco, al igual que lo había estado durante los últimos meses, con monedas como Ethereum y Dogecoin que registraron máximos históricos, mientras que Bitcoin se estabilizó por encima de los USD 55,000. Entonces, sucedió algo que sacudió a todo el mercado de las criptomonedas. Elon Musk anunció que Tesla no aceptaría Bitcoin para sus autos, borrando cualquier ganancia que el anuncio le había proporcionado a la criptografía en los últimos meses.
Cuando Tesla había comprado USD 1.5 mil millones en Bitcoin, la compañía también anunció que comenzaría a aceptar la moneda a cambio de sus autos. Esto llevó no solo a Bitcoin, sino a todo el mercado de criptomonedas a subir a un ritmo sin precedentes, lo que llevó a la criptomoneda más valiosa a un récord de más de USD 65,000.
Luego, después de unos meses y una actuación de SNL, Elon Musk salió y tuiteó que Tesla ha decidido cancelar sus planes de Bitcoin y que la compañía no lo aceptará como una forma de pago debido a los efectos ambientales nocivos que ocasiona su minería.
Esto llevó a que el mercado se saliera de control y que Bitcoin cayera a su precio más bajo en unos pocos meses. El efecto también fue visible en otras monedas, y Ethereum (junto con muchas otras) también vio la desaparición de miles de millones en solo unos días.
Como si eso no fuera lo suficientemente malo, China anunció múltiples restricciones sobre las criptomonedas, y agregó que los activos digitales no se pueden usar para transacciones. El país ordenó a los bancos y otras partes de sus instituciones financieras que no brinden ningún servicio relacionado con las criptomonedas. Esto incluye cambios de moneda, registro, negociación, compensación y liquidación.
Todo esto combinado ha dejado a Bitcoin y otras criptomonedas consternados, borrando billones del mercado en solo unos pocos días.
