iguiendo los mismos pasos que la moribunda Kodak, ahora es el fabricante de memorias RAM Elpida quien se acogió a una ley para la protección frente a la bancarrota en Japón, algo que allá se llama formalmente “petición para la reorganización corporativa” y evita que se declare la empresa en quiebra y les quiten todo para pagar las deudas, obteniendo así un tiempo de gracia para ordenar ideas y proyectos que permitan volver a la liquidez financiera.
Y es que Elpida ya había avisado de su mal momento cuando se supo que se unirá a Micron en el negocio de las memorias RAM, dado que el rubro está tan mal que el Presidente de la compañía, Yukio Sakamoto, afirmó que los chips DRAM están “tan baratos como el arroz”. Eso que en oriente el arroz es bastante económico. Porque las ventas van cuesta abajo y eso se explica por dos factores: la fuerte entrada de Samsung a la fabricación de esta clase de chips y también la baja que significó para todos la inundación en Tailandia, afectando al rubro de la computación en general.
Tienen una deuda de USD$5.500 millones y es por esto que tuvieron que recurrir a esta ley de protección, sino se iba a empezar a cobrar y como no hay con qué pagar, se tiene que entregar la empresa. Ahora queda por saber qué es lo que se hará con el tiempo ganado, a ver si Elpida logra reinventarse para salir adelante, pues las memorias RAM no van a dar los frutos suficientes para pagar tanto dinero que se debe.