¿Recuerdan las palabras de Keiji Inafune sobre la industria japonesa? Según el creador de Megaman, la industria y los desarrolladores japoneses básicamente no saben lo que quieren y no saben reinventarse, y por eso es que las cosas están como están.
Hideo Kojima, el hombre detrás de Metal Gear Solid, tiene otra visión. Para él, parte del problema está en el objetivo de los desarrolladores japoneses, y cree que muchos se enfocan solo en Japón y en el mercado de ese país, y “no saben realmente que es lo que quiere en el resto del mundo”.
Y además, hay una cuestión tecnológica en juego. Kojima también piensa que en Japón hay cada vez menos gente que viaja a otros lados del mundo y que está al tanto de los últimos avances tecnológicos. “Desde ese punto de vista, Japón se está quedando atrás. El problema mayor es saber como usar esa tecnología para crear algo. Cuando se trata de jugabilidad, desafortunadamente muchos creadores japoneses no gustan de crear una experiencia que dé libertad. Ese tipo de juegos no se están haciendo en Japón”.
Por último, Kojima dice que porque sus compatriotas no miran hacia afuera, tampoco se logran avances tecnológicos y así se genera un círculo vicioso. Aún así, las cosas podrían cambiar en el futuro cuando los desarrolladores entiendan y adapten una visión global a la hora de crear sus juegos: no se trata de “Japón versus el mundo”, sino que juegos para todos. En occidente lo entendieron y de ahí el éxito actual de los juegos creados en este lado del mundo.
