El de la foto es el Cotton Candy, desarrollado por FXI Technologies. Parece una simple memoria USB, pero en realidad es un prototipo de computador portátil, que utiliza una CPU ARM Samsung Exynos dual-core de 1.2 GHz. Es el mismo procesador que se puede encontrar en un Samsung Galaxy S II.
También tiene WiFi 802.11n, Bluetooth, salida HDMI y una ranura microSD. ¿Increíble o no? El dispositivo fue diseñado para lo que se ha llamado “computación en cualquier pantalla”, lo que significa que si conectas esto en una pantalla, puedes convertirla en una estación de trabajo con Android 2.3 instantáneamente. Y puede ser casi cualquier pantalla – una TV, laptop, tablet, teléfono, etc.
Si conectas el Cotton Candy en un Mac o PC, el sistema operativo reconocerá el aparato como un dispositivo, y cuando lo cargues podrás correr Android en una ventana sobre tu SO normal, o incluso transferir archivos de un sistema a otro. Si lo pones en un televisor, Cotton Candy puede usar su Bluetooth para reconocer otros dispositivos (como un teclado) para que puedas controlar el sistema.
La idea de este dispositivo no es reemplazar los PCs, sino que actuar como un apoyo o dispositivo secundario. Todavía es un prototipo, y la idea en un principio es venderlo a desarrolladores que puedan crear o darle distintas aplicaciones útiles a los consumidores.
Aunque por ahora sólo funciona con Android, FXI espera en el futuro que pueda correr Ubuntu y versiones de Windows 8. Como todavía no está a la venta, no tiene precio, pero la compañía espera poder venderlo por menos de US$200.
Fuente: Geekosystem