Una extraña movida es la que ha tomado Blizzard, creadora del reciente y popular videojuego Diablo III, quien ha decidido congelar las cuentas –banear– de quienes corran el título sobre sistemas operativos basados en Linux y a su vez utilicen Wine para emular el entorno de Windows y entregar las librerías necesarias para hacer compatible un juego que está disponible únicamente para sistemas operativos Windows y Mac OS X.
El problema, según reportan algunos usuarios, es que el sistema para detectar trampas –anti-cheat– de Diablo III identifica Wine como una amenaza y un modo de hacer trampa. Peor aún, Blizzard se niega a devolver el dinero a quienes lo han pedido, argumentando que los usuarios no tienen derecho a utilizar programas de terceros para correr Diablo III, ya que esto les otorga una ventaja injusta y de hecho, los estarían baneando por hacer trampa (cheat), no por usar Wine, en rigor.
Pese a esto, la confusión está en el aire y es recomendable que si alguien utiliza dicha configuración, deje de hacerlo hasta que el tema se aclare, a riesgo de no perder su cuenta y el dinero que ha pagado por ella.
Fuente: Fudzilla