El inconfundible Shigeru Miyamoto reveló en una entrevista proporcionada al sitio IGN su preocupación por la abundancia de títulos que giran alrededor de las armas y el impacto que tiene sobre el jugador la violencia contenida en los títulos con esa característica.
A veces me preocupa la continua dependencia (de la industria) a hacer juegos tan centrados en las armas, de los cuales hay bastantes. Me cuesta trabajo imaginar –particularmente hablando de jóvenes generaciones- cómo se sientan a jugar e interactuar con eso los usuarios.
Miyamoto mencionó que el problema viene con el desconocimiento de los padres acerca de lo que compran para sus hijos, fruto de la llegada de los medios digitales y la complicación que le ha significado a los progenitores el informarse acerca de los contenidos.
Las anteriores formas de entretenimiento como los libros hacían fácil a los padres saber lo que estaban comprando para sus hijos. Con la transición al medio digital eso se ha convertido en algo más complicado de entender para los padres. Desde la perspectiva del desarrollador de juegos, es importante tomarlo en cuenta.
Sin duda la violencia ha proliferado en gran medida dentro de la industria del videojuego, pero colocar a los padres como sujetos desinformados es un tanto pretencioso a estas alturas. Existen diferentes filtros para evitar que contenidos maduros lleguen a los niños (como por ejemplo el sistema de clasificaciones) y es responsabilidad de cada uno informarse al respecto.
Fuente: IGN