Cuando se trata de armar una PC que combine potencia, estilo y un diseño que robe miradas, la elección del gabinete es tan crucial como cualquier otro componente. En esta ocasión, tuve la oportunidad de probar el Crystal Z8 Floe de Formula V Line. Se trata de un gabinete que promete no solo un look imponente con su panel de vidrio templado y malla premium, sino también un rendimiento térmico de primer nivel gracias a su diseño de doble cámara y opciones de enfriamiento avanzadas.
El gabinete tiene un diseño que nos recuerda al memorable Lian Li O11-XL pero a un nivel mas accesible. En este review, te contaré mi experiencia, desde el unboxing hasta cómo se comporta en el día a día, para que descubras si el Crystal Z8 es el compañero ideal para tu próximo build.
Su estructura combina un panel frontal de vidrio templado robusto con una malla premium adicional que no solo aporta un toque estético distintivo, sino que también promete una ventilación optimizada. Las líneas limpias y el acabado en negro (o blanco, según la variante) le dan un aire moderno y sofisticado, perfecto para quienes quieren que su setup sea una pieza central en cualquier habitación.
El lateral, también de vidrio templado, ofrece una vista cristalina al interior, ideal para mostrar componentes con iluminación RGB o simplemente para presumir un montaje impecable.
La eleccion de introducir los botones de Power, Reset, audifonos y microfono, junto con el USB en el lateral puede molestar a algunos, pero lo cierto es que es una decision inteligente. Definitivamente hace que ubicar el gabinete del lado derecho sea imperioso.
Con dimensiones de 435 x 230 x 456 mm, este chasis tiene una presencia imponente pero no abrumadora, y su peso de aproximadamente 7 kg lo hace manejable al transportarlo. Los detalles como los filtros integrados en la parte superior e inferior refuerzan esa sensación de calidad pensada en el usuario, protegiendo el interior del polvo sin sacrificar el flujo de aire.
Formula V Crystal Z8 Floe – Interior
Al abrir el Crystal Z8 Floe, lo primero que salta a la vista es su diseño de doble cámara, una solución que separa la fuente de alimentación y los discos duros del resto de los componentes principales. En la parte inferior, hay un compartimiento dedicado para la fuente de alimentación, con espacio suficiente para modelos ATX de hasta 200 mm de longitud, lo que asegura compatibilidad con fuentes potentes sin complicaciones.
Encima, una cubierta metálica mantiene los cables organizados y fuera de la vista, algo que los amantes del cable management agradecerán. El soporte para almacenamiento es inteligente: cuenta con dos bahías para HDD de 3.5″ y un par de soportes para SSD de 2.5″, todo bien distribuido para no entorpecer el flujo de aire ni el acceso a otras piezas.
Admite hasta ocho ventiladores en total: tres en la parte frontal (donde los soportes innovadores facilitan su instalación), tres en la parte superior, y dos en la sección trasera junto a la fuente. Los ventiladores frontales y laterales estan incluidos y su multicolor es parte del modelo Floe.
Para los que prefieren refrigeración líquida, hay espacio de sobra: el frontal soporta radiadores de hasta 360 mm, el superior también acepta 360 mm, y la parte trasera permite un radiador de 120 mm.
Dentro del Crystal Z8, el espacio para la tarjeta gráfica es generoso, con soporte para GPU de hasta 400 mm de longitud, más que suficiente para las bestias más grandes del mercado como una RTX 4090. La placa base no se queda atrás, ya que es compatible con formatos ATX, Micro-ATX y Mini-ITX, ofreciendo flexibilidad para todo tipo de configuraciones.
Armado
Vamos a proceder al armado con un Ryzen 7 3700X con 32GB DDR4-3000, una Geforce GTX 1660 Super, un SSD WD Blue de 1TB SATA y una fuente de alimentacion de 800W.
Los siete slots de expansión traseros permiten instalar varias tarjetas si el usuario lo desea, y la altura máxima del cooler CPU es de 170 mm, lo que da cabida a soluciones de enfriamiento por aire de alto rendimiento. Todo esto se complementa con un sistema de gestión de cables bien pensado, con canales y clips que facilitan mantener el interior ordenado, algo que no solo mejora la estética, sino también el flujo de aire general.
El manejo de cables hace muy sencillo el armado, sin embargo hemos notado un detalle importante que hay que tener en cuenta y es que el conector de USB 3.0 interno tiene un espacio muy estrecho ya que los fans inferiores estan en el medio de su camino.
Si tu motherboard posee dichos conectores en la parte inferior, deberas tener cuidado a la hora de montar los cables para no ejercer demasiada presion.
Formula V Line Crystal Z8: En funcionamiento
El gabinete posee todos los ventiladores con luz LED estilo Rainbow. El detalle interesante es que dependiendo del voltaje aplicado a ellos, cambiara su color. El voltaje mas bajo, que le permite tenerlo encendido, que es 5V solo encendera los LEDs de color rojo, cambiando el aspecto dependiendo de la potencia a la cual dichos fans esten regulados.
Formula V Line Crystal Z8 Video
Estética
A nivel estética el gabinete sobresale en todos los sentidos. Hay que tener en cuenta sin embargo que no es posible regular la intensidad de iluminacion de los LEDs separado de las revoluciones de los FANs. Esto podria provocar que a maxima potencia, la iluminacion que emiten sea demasiado intensa para tu gusto. En este aspecto no puede hacerse demasiado, más que regular su intensidad a un nivel mas bajo para que los LEDs reduzcan su intensidad o bien reemplazar los FANs por algún otro modelo que permita esta funcionalidad.
Lo cierto es que este es un gabinete económico y como tal, deben hacerse concesiones y esta es una de ellas.
Resultados
El gabinete ofrece excelentes resultados de refrigeracion. Con todos los fans girando al minimo (5V) y con el CPU en idle obtenemos temperaturas de 37 grados. Mientras que en carga total usando Prime95 el CPU llego a un maximo de 65 grados. El GPU utilizando 3DMark llego a un maximo de 66 grados.
Cuando usamos los fans al maximo, lo cual no incrementa el sonido de manera significativa, el resultado fue algo mejor, sin ser excepcional y la temperatura del CPU bajo a 62 grados mientras que el GPU toco un maximo de 63.
Conclusión
El Crystal Z8 de Formula V Line es un gabinete que brilla con luz propia, especialmente en el apartado estético, donde su diseño de vidrio templado y malla premium lo convierten en una pieza que sobresale en cualquier setup. Su rendimiento térmico y la versatilidad de su interior lo hacen una opción sólida para builds de gama media y alta, con un equilibrio notable entre espacio, flujo de aire y facilidad de montaje.
Sin embargo, no todo es perfecto: la imposibilidad de regular la intensidad de los LEDs por separado de las revoluciones de los ventiladores puede ser un inconveniente. A máxima potencia, la iluminación podría resultar demasiado intensa para algunos gustos. La única solución sería ajustar las revoluciones a un nivel más bajo para atenuarla. O también reemplazar los ventiladores por modelos con control RGB independiente, algo que no todos estarán dispuestos a hacer.
Aun así, hay que poner las cosas en perspectiva: estamos ante un gabinete económico que hace concesiones lógicas para mantener su precio competitivo. Esta limitación con los LEDs es una de ellas, pero no opaca sus virtudes. Si buscas un chasis atractivo y funcional, dentro de tus capacidades economicas, el Crystal Z8 sigue siendo una recomendación clara.
Lo Bueno
- Diseño moderno con vidrio templado.
- Excelente flujo de aire gracias al diseño de doble cámara.
- Espacioso: soporta GPUs grandes y múltiples radiadores.
- Buen sistema de gestión de cables.
- Ventiladores incluidos con iluminación LED.
- Filtros antipolvo integrados.
Lo Malo
- No se puede regular la iluminación de los ventiladores de forma independiente.
- Conector USB 3.0 interno con poco espacio si la placa tiene puertos inferiores.
- Puertos frontales ubicados en el lateral, lo que condiciona su posición en el escritorio.
