El Salón Mundial de la Fama de los Videojuegos, ubicado en el Strong National Museum of Play, ha anunciado a sus nuevos integrantes: Defender, GoldenEye 007, Quake y Tamagotchi. Estos cuatro títulos, emblemáticos por su impacto en la cultura popular y en la evolución de la industria, fueron seleccionados de una lista de finalistas que incluía a Age of Empires, Angry Birds, Call of Duty 4: Modern Warfare, Frogger, Golden Tee, Harvest Moon, Mattel Football y NBA 2K.
El anuncio se realizó durante una ceremonia especial que contó con la presencia de figuras clave como Eugene Jarvis, líder del equipo de desarrollo de Defender; John Romero, co-creador de Quake; y Tara Badie, directora de Tamagotchi en Bandai Namco. Los juegos ahora forman parte permanente de la rotonda del Salón Mundial de la Fama, en el marco de la exhibición ESL Digital Worlds.
Defender, GoldenEye 007, Quake y Tamagotchi
Defender (1981) revolucionó los salones recreativos al introducir un control complejo y una jugabilidad intensa en un shooter de desplazamiento horizontal. Con más de 55.000 unidades vendidas, marcó un antes y un después para los juegos que buscaban desafiar al jugador. Jeremy Saucier, vicepresidente asistente del museo, destacó que Defender «separó a los jugadores ocasionales de los dedicados» y sentó las bases para experiencias más profundas.
Por su parte, GoldenEye 007 (1997) redefinió los shooters en consola. Desarrollado por Rare para Nintendo 64, combinó narrativa, sigilo y acción con un modo multijugador local que dejó huella en generaciones enteras. Andrew Borman, director de preservación digital, señaló que su impacto «es palpable en prácticamente todos los FPS para consolas posteriores, incluida la franquicia Halo.»
Tamagotchi, lanzado en 1996 por Bandai, introdujo el concepto de mascota virtual portátil. Más que un juego, fue una experiencia emocional de crianza digital que impulsó el género de simulación de vida. Kristy Hisert, encargada de colecciones, destacó su rol como «alternativa al juego competitivo, promoviendo la conexión emocional y la personalización».
Finalmente, Quake (1996), de id Software, impuso un nuevo estándar técnico y conceptual con su motor gráfico en 3D y su enfoque multijugador en línea. Fue pionero en los esports y su motor sigue siendo utilizado y modificado incluso hoy. Lindsey Kurano, curadora de juegos electrónicos, afirmó que «Quake dejó un legado vivo, no solo por su diseño, sino porque su código aún es parte activa de la industria moderna».
Sobre el salón mundial de la fama de los videojuegos
Fundado en 2015, el World Video Game Hall of Fame reconoce juegos de todos los formatos—arcade, consola, computadora, portátil y móvil—que han gozado de una popularidad sostenida y han tenido un impacto significativo en la industria o la cultura general. Los títulos son seleccionados por un panel de periodistas, académicos y expertos del sector, y el público puede nominar juegos cada año. Los elegidos son exhibidos de manera permanente en la segunda planta del museo, dentro de la muestra ESL Digital Worlds: High Score.
