Daymare: 1994 Sandcastle es un juego de terror de supervivencia en tercera persona y una precuela del Daymare: 1998. Desarrollado por Invader Studios y publicado por Leonardo interactive con enemigos más aterradores, mecánicas de juego mejoradas y una renovada atención al detalle en los gráficos y el diseño de sonido, Daymare: 1994 Sandcastle ofrece una experiencia de horror que te mantendrá en vilo desde el primer momento. Te contamos más en esta reseña para PC.
Trama
La historia se sitúa en el año 1994 y gira en torno a una instalación de investigación secreta llamada Sandcastle. Esta instalación está ubicada en la ficticia ciudad de Keen Sight, Idaho, y es propiedad de la Corporación Hexacore. La corporación lleva a cabo experimentos con un nuevo virus llamado H3N7, que tiene el potencial de erradicar a toda la raza humana.
En este caso, asumes el papel de un miembro del equipo H.A.D.E.S. (División Avanzada de Hexacore para Extracción e Investigación), encargado de investigar la instalación después de perder toda comunicación con ella. El equipo pronto descubre que el virus ha infectado al personal, convirtiéndolos en mortales mutantes. Ahora debes abrirte camino a través de la instalación, descubrir la verdad detrás del virus y evitar su propagación.
Gameplay
Daymare: 1994 Sandcastle es un desafiante juego de terror de supervivencia que requiere que administres los recursos tomando decisiones estratégicas. Presenta una mezcla de enemigos feroces y mortales, mecánicas de juego de acción intensa, rompecabezas ambientales, una banda sonora escalofriante y mucha exploración.
El juego tiene tres personajes jugables, cada uno con sus propias habilidades y armas únicas. Puedes alternar entre los personajes en cualquier momento, y cada uno tiene su propia historia que se entrelaza con las demás.
Además, cuenta con un sistema de creación que permite fabricar nuevas armas e objetos utilizando recursos que se encuentran en toda la instalación. Este sistema de creación es esencial para la supervivencia, ya que los recursos son escasos y los enemigos son poderosos.
Una de las características clave de Daymare: 1994 Sandcastle es su sistema de creación el cual permite fabricar nuevas armas y objetos utilizando los recursos que se encuentran en las instalaciones. La gestión eficiente de estos recursos es esencial para la supervivencia, ya que son escasos.
Tiene tres niveles de dificultad: Modo Historia, Normal y Difícil.
La narrativa se centra en la exploración, la resolución de rompecabezas y en el combate intenso. Si bien los rompecabezas son relativamente sencillos y el combate tiende hacia un enfoque más orientado a la acción, el juego presenta un desafío debido a su munición limitada y la ausencia de armas cuerpo a cuerpo. Una mecánica de congelación ayuda a ralentizar o crear rutas de escape al congelar a los enemigos, agregando profundidad a la jugabilidad. La inclusión de un sistema de puntos de control, aunque ocasionalmente frustrante, contribuye a generar más tensión en el juego.
¿Cómo se compara Daymare: 1994 Sandcastle con su predecesor, Daymare: 1998?
Daymare: 1994 Sandcastle presenta varias novedades en comparación con su predecesor, Daymare: 1998. En primer lugar te enfrentas a numerosos y letales enemigos, mientras exploras un mundo renovado con herramientas y mecánicas adicionales. La interfaz ha sido renovada, y los rompecabezas ofrecen una experiencia más fresca. Además, nuevos personajes se unen a algunos conocidos, junto con un armamento innovador y enemigos más inteligentes. También se suma dicho sistema de congelación.
A pesar de rompecabezas más sencillos, los gráficos y el diseño de sonido mejorados, junto con una perspectiva en tercera persona, ayuda a obtener una experiencia inmersiva en este juego de horror narrativo.
Gráficos y sonido
El juego presume de buenos gráficos a través del motor de Unreal Engine 4, con modelos de personajes detallados y entornos que transmiten eficazmente su atmósfera de horror. El diseño de sonido mejora aún más la experiencia con una banda sonora inquietante y efectos de sonido bien ejecutados que intensifican la sensación de suspenso en general.
Requisitos del sistema recomendados para jugar en PC:
- Sistema operativo: WINDOWS 7, 8, 8.1, 10 (Se requiere de 64 bits)
- Procesador: Intel® Core i7-3770 o AMD FX-9590 o superior
- Memoria: 16 GB de RAM
- Gráficos: NVIDIA GeForce GTX 1060 o AMD Radeon RX 580 con 6 GB de RAM de video
- DirectX: Versión 12
- Almacenamiento: 23 GB de espacio disponible
¿Cómo afectan los elementos visuales al juego?
Daymare: 1994 Sandcastle se destaca por su atmósfera de horror, que se logra a través de diversos elementos visuales. Estos elementos incluyen pasillos laberínticos que generan claustrofobia, misterios enigmáticos que crean inquietud, armamento innovador que hace que te sientas amenazado/a, y enemigos inteligentes que mantienen la tensión. Además, la interfaz renovada y la iluminación atmosférica añaden inmersión, mientras que efectos visuales como salpicaduras de sangre y humo refuerzan la atmósfera de horror. Los gráficos en general resultan aceptables y la perspectiva en tercera persona completan la experiencia.
Música
Este aspecto también tiene lo suyo con un tema principal llamado «Loneliness», interpretado por Cristina Scabbia.
Conclusión
Daymare: 1994 Sandcastle combina elementos de acción, resolución de rompecabezas, exploración y horror de supervivencia. La jugabilidad de combate no está especialmente bien ejecutada, pero la atmósfera y la ambientación del juego resultan bastante atractivas.
Ofrece también una experiencia llena de suspenso y acción, una narrativa envolvente y una atmósfera de horror bien aplicada. Si buscas un juego que desafíe tus habilidades de supervivencia, Daymare: 1994 Sandcastle podría ser justo lo que necesitas.
Lo Bueno
- Un Survival Horror sólido.
- En ocasiones, la atmósfera puede ser cautivadora.
- Los rompecabezas brindan un respiro en medio del combate.
- Arma de congelación que permite realizar múltiples tareas.
Lo Malo
- Si bien se centra bastante en el combate, deja que desear.
- El ritmo de juego podría ser mejor.
